Hoy en día el estrés no tiene una buena reputación, sin embargo, se origina como una respuesta positiva ante situaciones de peligro o en las que la seguridad física y/o emocional se ve amenazada, de forma que se activan ciertos mecanismos de defensa que nos ponen en estado de alerta y nos preparan para hacerle frente al peligro.

Para nuestros ancestros el estrés era una reacción benéfica que les permitía la supervivencia. Actualmente, nos enfrentamos más a situaciones de “amenaza” psicológica que física, sin embargo, la tensión muscular se sigue acumulando de igual manera, lo cual puede provocar serios problemas de salud.

Existen múltiples estrategias para liberar la tensión y el estrés; entre las más eficaces se encuentra  realizar actividad física de forma constante. Sin embargo, debes saber qué tipo de actividad elegir para que te ayude a liberar estrés eficazmente y que no resulte contraproducente. Éstos son algunos consejos que te ayudarán a decidir mejor el tipo de actividad física que realizarás para relajarte.

  • Evita los deportes que sean demasiado demandantes. Sobre todo si vas a iniciar, es recomendable encontrar alguna actividad física que sea moderada y que te permita ir avanzando según tu ritmo.
  • Procura que tus metas sean realistas. Pedirle mucho a tu cuerpo (especialmente cuando no está acostumbrado a realizar alguna actividad física) hará que te esfuerces innecesariamente, y si tus metas son muy ambiciosas y terminas por no cumplirlas, en lugar de acabar con el estrés estarás añadiendo más.
  • Las actividades al aire libre son excelentes para realizar ejercicio y relajarte al mismo tiempo. Si tienes la opción, elige un parque o una zona que sea tranquila para ejercitarte.
  • Entrenar con compañía de vez en cuando puede ayudarte a mantenerte motivado. La convivencia con un amigo o un conocido también será un plus para alejar tu mente de situaciones estresantes y distraerte un rato.
  • Evita caer en la monotonía alternando entre diferentes tipos de ejercicio de vez en cuando, así no te aburrirás y te mantendrás motivado para seguir adelante. Además, la mente y el cuerpo necesitan un poco de variedad para poder obtener mejores resultados.
  • Es válido recurrir a ayuda profesional si lo consideras pertinente. Dependiendo del ejercicio tal vez no sea necesario, pero si crees que es una buena idea, recibir la orientación de un experto te ayudará a maximizar los beneficios de la actividad física.
  • Uno de los puntos más importantes: no olvides elegir algo que te guste y te llame la atención. Mantenerse activo requiere de motivación, y será más fácil ser constante si realizas algo que te llena y que te gusta.

Además de la actividad física, seguir alguna rutina de relajación puede ayudarte a mantenerte libre de estrés y a potencializar los resultados del ejercicio, además es algo que puedes hacer incluso a bordo de un aerotaxi. Existen muchos recursos para principiantes que pueden utilizar para crear tu propio proceso; recuerda que no hay rutinas buenas o malas, lo importante es encontrar algo con lo que te sientas cómodo y que te permita relajar tu mente y cuerpo para que así puedas afrontar los retos del día a día con una mejor actitud.